Estas jornadas, las primeras celebradas en nuestro país en que aficionados de los distintos clubes han debatido sobre la necesaria participación de las aficiones en la propiedad y gestión del fútbol, han sido un éxito no sólo de asistencia sino que han supuesto el pitido inicial para un movimiento que se venía gestando desde que allá por 1992 los aficionados fueran marginados en la mayoría de clubes profesionales españoles cuando estos se convirtieron en sociedades mercantiles obligados por la Ley del Deporte.
Precisamente de la Ley del Deporte o más bien de la nueva Ley de Deporte Profesional que habrá de sustituirla se ha hablado mucho en las jornadas, Ramón Barba Subdirector General de Régimen Jurídico del Deporte del CSD comentó durante su intervención la tan esperada reforma legal que afecta al deporte profesional que llevaría la abolición de la obligación de estar constituido como sociedad anónima para competir en categoría profesional.
Entre las intervenciones de dirigentes destacó la de William Gaillard, Asesor de Presidencia de UEFA que manifestó el viernes “Los aficionados sois la salvación del fútbol” en lo que pasó de ser una jornada de discursos de cortesía a un foro en que los aficionados por primera vez pudieron libremente preguntar a los dirigentes por temas como los horarios de los partidos o sobre la posibilidad de demorar la transformación en SAD de un club dado el cambio legal previsto, pregunta realizada por un aficionado del CD Mirandés, ahora inmerso en un proceso de conversión ampliamente contestado por su afición que no entiende porque les obligan a convertirse siendo un club con cuentas muy saneadas.
El otro plato fuerte del viernes fue la presentación por parte de FASFE de los resultados de un sondeo realizado a los aficionados españoles en qué quedó patente la mala opinión que la hinchada tiene del gobierno de nuestro fútbol y sus ganas de participar en su mejora.
Durante la jornada del sábado se celebraron tres sesiones con interesantes debates sobre la función social de los clubes de fútbol, las actividades de las asociaciones de aficionados en su control y la importancia de esta participación. El punto final y plato fuerte fue una mesa redonda con participación del propio Gaillard de UEFA, José Ángel Zalba, presidente de FASFE, Miguel García Caba de la LFP, el catedrático de economía financiera y exdirectivo del Real Madrid José Luis Sánchez Fernández de Valderrama y Pedro Velázquez Adjunto a la Dirección General de Deporte de la Comisión Europea en que se trató el tema de la lamentable situación económica del fútbol español y como la solución debería pasar por un ineludible cambio en la arquitectura de la gobernanza del sistema que introduzca incentivos que lo lleven a la sostenibilidad entre los que José Ángel Zalba destacó “la introducción de canales de participación de los socios como principal grupo implicado interesado en la supervivencia a largo plazo de los clubes y de un adecuado marco de regulación y supervisión de las cuentas”.
Sirvió también este foro para que se dieran los primeros encuentros entre los aficionados movilizados por la salvación de sus clubes. Hinchas pertenecientes a asociaciones o clubes fundados por ellos mismos como el Club de Accionariado Popular Ciudad de Murcia, el CD Palencia o el Atlético Club de Socios o clubes comunitarios como el UC Ceares de Gijón que hicieron honor a lo que Niamh O’Mahony, representante del Cork City FC, club refundado por sus hinchas en Irlanda dijo desde la tribuna el mismo sábado “Nadie se va a preocupar por vuestro club más que vosotros los aficionados”.
Aficionados de más de 30 clubes españoles, dirigentes académicos y periodistas han participado este fin de semana en Madrid en las Jornadas de Mejora de la Gobernanza del Fútbol a través de la Participación de las Aficiones y la Propiedad Comunitaria, convocados por la Federación de Accionistas y Socios del Fútbol Español y Supporters Direct Europe.
Estas jornadas, las primeras celebradas en nuestro país en que aficionados de los distintos clubes han debatido sobre la necesaria participación de las aficiones en la propiedad y gestión del fútbol, han sido un éxito no sólo de asistencia sino que han supuesto el pitido inicial para un movimiento que se venía gestando desde que allá por 1992 los aficionados fueran marginados en la mayoría de clubes profesionales españoles cuando estos se convirtieron en sociedades mercantiles obligados por la Ley del Deporte.
