No a las SADVolvió el fútbol. ¡Por fin!, dirán algunos. Pero el bullicio, el griterío y la emoción han quedado huérfanos  en medio del silencio.

Todo comenzó hace  19 años cuando vinieron a por los socios de los clubes de fútbol, a una gran mayoría nos obligaron a dejar de serlo para ser simples abonados sin ningún derecho. Convirtieron nuestros clubes en SAD. Era, decían… la solución a la deuda. Privatizaron un sentimiento con el resultado conocido: la ruina.

Hemos sido humillados, nos han arrebatado y  han vendido nuestro patrimonio, nos han endeudado, han jugado con nuestros escudos y ensuciado nuestros colores con operaciones especulativas en aras de sus  intereses personales, amordazándonos cuando hemos intentado denunciar estos atropellos, hasta el punto de impedirnos expresarnos en nuestros estadios.

Fueron a por los socios, pero  como vosotros no erais socios, no hicisteis nada.

Recientemente acabamos de vivir una huelga de futbolistas, que se ha saldado con un parche que puede volver a romper la frágil relación entre clubes y jugadores. Se ha explicado que se trata de trabajadores que no cobran, y les han obligado a recuperar la jornada el 1 de mayo.

Fueron a por los jugadores, pero como vosotros no erais jugadores no hicisteis nada.

Pero como alguien tendrá que seguir pagando el nivel de vida que algunos han conseguido gracias a nuestra pasión, regocijándose en sus sillones, ahora os ha tocado a los periodistas, esta burbuja insostenible que ya amenazó las retransmisiones televisivas, ahora le toca a la radio. Esas retransmisiones que nos acompañaron, metieron el futbol en las casas, que crearon aficiones y nos acompañaron toda la vida.

Ahora que van a por vosotros. Aun queda alguien…. la voz de quienes descubrimos hace tiempo que esta triste realidad puede cambiar, hemos iniciado desde nuestras organizaciones locales distintas iniciativas para recuperar nuestros clubes y reestructurar así el mundo del fútbol español, que camina en una deriva insostenible. A lo largo de los próximos meses recuperaremos el diálogo con las distintas formaciones políticas en su carrera electoral para conocer su visión de la reforma de la ley del deporte, y conseguir la aprobación de las Cortes para que la forma jurídica de SAD sea voluntaria, posibilitando la reconversión de las sociedades anónimas nuevamente en clubes deportivos gestionados directamente y democráticamente por la afición.

Esta gran transformación del deporte español ya iniciada ha pasado de puntillas en los medios de comunicación. Apenas hemos podido escuchar breves comentarios en las ondas, pocos debates. Confiamos que ahora se vea como lo que es, la esperanza para el fútbol español.

José Ángel Zalba Luengo
Presidente de FASFE